¡Cayó La Gran Babilonia!

Triunfo de Cristo
Presentación de la Verdadera Esposa del Cordero
Alegrémonos y regocijémonos y démosle gloria, porque han
llegado las bodas del Cordero, y su esposa se ha engalanado
y se le ha concedido vestirse de lino deslumbrante de
blancura- - el lino son las buenas acciones de los santos”
(Ap.19, 7-8).
No
era la “Ramera” la
esposa del Cordero. La verdadera esposa es cada alma,
cada uno de nosotros que llega y vive en Dios. Ésa es la
novia preparada, que se convierte en
esposa engalanada, vestida de lino
porque fuimos lavados
con la sangre del Cordero, y Dios ha derramado su Espíritu
sobre nosotros para fortalecernos y que vivamos en el Amor y
la Verdad, y así nuestras acciones sean
santas. Todo Es, en la gloria de Dios. Es el encuentro
final. Y es el encuentro de todo el pueblo de Dios,
la Nueva Jerusalén que veremos en el siguiente tema.
Luego
me dice: “Escribe: Dichosos los invitados al banquete de
bodas del Cordero”.
Me dijo además: “Estas son palabras verdaderas de
Dios”. Entonces me postré a sus pies para adorarlo, pero él
me dice: “No, cuidado; yo soy un siervo como tú y como tus
hermanos que mantienen el testimonio de Jesús.
A Dios tienes que adorar”. El testimonio de Jesús es
el espíritu de profecía (Ap.19, 9-10).
Dichosos
todos los que aceptan la invitación al
banquete
(Ap.19,17). Estas
son palabras verdaderas de Dios,
quiere confirmar cuanto fue inspirado en la visión del
evangelista y reprende nuestra actitud de postrarnos ante
otros, como nos habíamos postrado incondicionalmente ante la
“Ramera”. Era un ángel al que quería adorar, pero ni aún
así; sólo Dios Es. Sólo ante Él hemos de postrarnos.
Y da su valor al
espíritu de profecía, el espíritu del profeta
simbolizado en Elías; porque quien
habrá de guiar al pueblo de Dios es el Espíritu
Santo, que perpetúa el testimonio de Jesús. Anunciando al
Paráclito Él dice: "El Espíritu Santo os lo enseñará todo y
os recordará lo que os he dicho"
(Jn.14,26).
Y "El Espíritu de la Verdad, que procede del
Padre, dará testimonio de mí. Pero vosotros también daréis
testimonio"
(Jn.15,26-27).
Testimonio de vida, no sólo de palabra. Nos vuelve a instar
hoy a que nos dejemos guiar por el Espíritu Santo. Y es así
como será su pueblo un solo rebaño guiado por un solo Pastor
(Jn.10,16).
Invitación en este mensaje a retomar el Camino del que nos
habíamos alejado porque estábamos ciegos, pero que Él
da la vista a los ciegos
(Lc.4,18).





Podéis descargar una copia
del libro en formato PDF completamente
gratis


Es Importante
Leer la Presentación Para Comprender Mejor el Libro
PRESENTACIÓN